miércoles, 13 de septiembre de 2006

UN MAR DE FUEGUITOS

Una bellisima amiga me regaló este texto en una tarde de septiembre tomando el te, una amiga de esas que encienden. A mi vez yo se lo regalé a otra amiga, que un dia me encendió. Se lo he mandado a mis hermanas para que se enciendan y a algunos amigos. Todos ellos estan en mi corazón....Por siempre....Es digno de figurar en este blog para compartirlo con todos, para que os encendais...........

UN MAR DE FUEGUITOS:

Un hombre del pueblo de Neguá, en la costa de Colombia, pudo subir al alto cielo. A la vuelta contó. Dijo que habia contemplado desde allá arriba la vida humana. Y dijo que somos un mar de fueguitos.
-El mundo es eso- reveló- Un montón de gente, un mar de fueguitos. Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás. No hay dos fuegos iguales. Hay fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores. Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, gente de fuego loco, que llena el aire de chispas. Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se enciende.
Del Libro de los Abrazos de Eduardo Galeano.

lunes, 4 de septiembre de 2006

PARA ENAMORADOS


Tengo por ahi a un hermano enamorado.

Este poema esta dedicado para el y su hermosa amiga- amor, porque la magia les dure como me dura a mi, por que este poema me lo dedicaron a mi una vez, hace ya tiempo, cuando la magia estaba en su pleno esplendor. Es mi preferido.

SUS OJOS SIEMPRE PUROS del poeta PAUL ELUARD.

Dias de lentitud, días de lluvia,
Días de espejos rotos y de cùspides perdidas,
Días de párpados cerrados al horizonte de los mares,
De horas parecidas, días de cautividad.

Mi espíritu, que brillaba aún sobre las hojas
Y las flores, mi espíritu está desnudo como el amor,
La olvidada aurora le hace bajar la cabeza
Y contemplar su cuerpo obediente y vacío.

Sin embargo, he visto los más bellos ojos del mundo,
Dioses de plata con zafiros en sus manos,
Verdaderos dioses, pájaros en la tierra
Y en el agua, los he visto.

Sus alas son las mias, nada existe
sino su vuelo que azota mi miseria,
Su vuelo de estrella y luz,
Su vuelo de tierra, su vuelo de piedra
En las olas de sus alas,

Mi pensamiento sostenido por la vida y por la muerte.